Historia de la medicina. Noticias en español (diciembre, 2021 #2)

Foto de Markus Winkler en Unsplash

Un premio Nobel y un perro, detrás del descubrimiento de la insulina. Por Pedro Gargantilla.
Fuente: ABC

‘La trepanación en Sevilla’, del neurocirujano Andrés Muñoz, se consolida en el mundo docente de la ciudad.
Fuente: Teleprensa

El peligro de los residuos médicos: la historia del accidente radiológico que acabó con la vida de cinco personas. Por Jorge García
Fuente: 20 Minutos. Salud

Matilde Hidalgo Navarro, la primera médica del Ecuador, a un siglo de su hazaña. Por Jenny Strada
Fuente: El Universo. La Revista

Un siglo del descubrimiento de la insulina: la primera aplicación en el país y el rol de la UBA. Por Matías Ayrala
Fuente: BigBang

La larga y turbulenta historia de los programas de vacunación obligatorios
Fuente: Ecuavisa

Joe Dimeo: La primera persona en recibir un transplante de cara ¡le cambió la vida!
Fuente: Tecnología

Celebradas Las I Jornadas del Museo de Historia de la Medicina y la Salud de Extremadura en Zafra
Fuente: DirectoExtremadura

Muere el escritor Noah Gordon, autor de ‘El Médico’
Fuente: RTVE

Claude Bernard y las triacas.Por Santiago Prieto.
Fuente: El Correo de España

A 150 años del fusilamiento de los ocho estudiantes de Medicina: ni olvidados ni muertos (+Video). Por Raúl Antonio Capote.
Fuente: Granma

A la venta el libro ‘El relicario. de la Prioral’, cuyos beneficios irán destinados a Cártitas.
Fuente: Diario de Cádiz

El Colegio de Médicos (Málaga) emite un vídeo en el que expertos analizan la convivencia del VIH con la pandemia.
Fuente: 20 Minutos

La historia de las vacunas.
Fuente: DW

Resnik: «Las vacunas son las más seguras de la historia de la medicina»
Fuente: Radio Nacional Argentina

Inocent Paulí, el coautor olvidado de la primera vacuna del cólera. Por Toni Pou
Fuente: ara

#HistoriaD: Los muertos relucientes. Por Javier Cancho
Fuente: Onda Cero

Soria Salud: Historia de la Gripe. Por Rafel Nájera Morrondo
Fuente: Soria Tv

Corta historia de las vacunas y la revolución de la medicina.
Fuente: Venezuela Unida

Sangrías, pasiones y amputaciones. Por Leonel González de León
Fuente: La diaria cultura

Lady Mary Wortley Montagu, la mujer pionera de la inmunización olvidada por la historia. Por Tom Solomon.
Fuente: BBC News

Exponer cuerpos enfermos sin voyerismo, el desafío de un museo vienés.
Fuente: El Financiero

Una exposición en Viena pone a prueba la ética de la exhibición de retos humanos
Fuente: El Espectador

Insulina: ¡Feliz Centenario! Por Fernando Ponte Hernando
Fuente: El Correo Gallego

Editorial Tirano Banderas presenta ‘La asistencia sanitaria en el medio rural español. Yecla (Murcia) 1700-1850’
Fuente: Murcia.com Yecla

Córdoba en los tiempos del cólera. Por Marcos Calligaris
Fuente: Cadena3

La ‘Materia médica’ de Dioscórides

A continuación insertamos el guión del vídeo La ‘Materia médica’ de Dioscórides, después de haber subido un nuevo vídeo al Canal de Youtube Medicina, historia y sociedad que se centra en los productos americanos que el traductor Andrés Laguna introdujo en su ‘Materia médica’ de Dioscórides (1555).

La Materia médica de Dioscórides es quizás el libro de medicina clásica y científica que más veces se ha publicado.   Todavía hoy podemos encontrar varias ediciones facsímiles, nuevas y traducciones y libros que son una adaptación. Aquí tengo unas cuantas [Se muestran a cámara].
En este vídeo vamos a sintetizar el contenido de esa Materia médica, lo que significó para la Medicina científica y conoceremos también algo sobre su autor.

[INTRO]

Parece que Dioscórides vivió y desarrolló su obra bajo el mandato de Nerón (54-68 dC). Nació en Anazarbo, ciudad de Cilicia, cerca de Tarso. Lo poco que sabemos de él procede de la carta o dedicatoria que precede al libro y que está dedicado a un amigo suyo llamado Ario, médico de Tarso.   Dioscórides fue médico militar en época de Claudio y Nerón. Esto le dio la oportunidad de viajar y de conocer numerosas provincias de lo que fue el Imperio romano, lo que le permitió enriquecer sus conocimientos heredados de sus antecesores en materia de plantas y drogas medicinales. Él mismo se confiesa como un apasionado de la materia médica. Insistimos en decir que no parte de cero sino que ya dispuso de información que procedía de otros escritos que él califica de incompletos, confusos, incluso equivocados y de otros más modélicos. Está claro que muchos de esos escritos recogían tradiciones de Mesopotamia, del antiguo Egipto, etc.   A lo largo de la historia se le han atribuido otras obras y se han incluido capítulos en la suya de otros autores. Mientras no hubo imprenta, los ejemplares manuscritos de su Materia médica diferían unos de otros en el número de libros o de capítulos que lo componían. Lo cierto es que su Materia médica es quizás la obra médica más veces reeditada y traducida de la historia. Todavía hoy sigue siendo objeto de interés por números estudiosos. Constituye una fuente indispensable para el estudio de la materia médica, de la botánica, de las creencias populares y también para el estudio de la expresión formal de la prosa científica y del léxico.    

Dioscórides está convencido del rigor con el que construye su obra. Dice que ha visto un buen número de plantas con sus propios ojos y que ha investigado otras a partir de entrevistas a los habitantes del lugar. Por otro lado, tiene experiencia de ellas.   Ordena los remedios por sus “acciones y efectos” de ahí que a nosotros nos parezca una obra donde todo se mezcla.  

Su texto recoge 600 plantas, 35 productos de origen animal y 90 minerales.  Puede considerarse como las guía farmacéutica más amplia de la Antigüedad. Galeno la consideró como la mejor de su clase y la difundió a través de sus obras.   Por libros, en el primero (129 capítulos) trata de perfumes, aceites, ungüentos, árboles y arbustos (líquidos, gomas y frutos). En el segundo (de 186 capítulos) aborda los animales y partes de animales, productos animales, cereales y hierbas. En el tercero (de 158 capítulos) se ocupa de raíces, jugos, hierbas y semillas. En el libro cuarto (de 192 apartados) sigue tratando de raíces y hierbas. Por último, en el quinto (de 162 capítulos) describe vides, vinos y minerales.   El método descriptivo para cada remedio suele ser el siguiente: nombres con el que se le conoce en varias lenguas de la época; origen; características morfológicas de la planta (raíces, tallo, hojas, flores, aromas, sabor, etc.). Este último aspecto no aparece en todos los capítulos y en otros se dice que la planta es conocida. Hay que decir que sus descripciones son a veces insuficientes para la identificación correcta.   Sigue después la enumeración de las propiedades, especialmente las médicas. En algunos casos menciona propiedades basándose en la teoría incorrecta de las signaturas. Se ocupa después de los modos de preparación y luego de sus usos medicinales que incluyen, en ocasiones, los efectos perjudiciales. Describe, además, dosis, “formas farmacéuticas”.  

Dioscórides usó los términos de género y especie pero en un sentido distinto al que hoy lo hacemos, pero de alguna manera su intento de poner orden fue de utilidad a lo largo del tiempo. También dio importancia al ambiente en el que crecían las plantas. No tenían las mismas propiedades las que lo hacían en las altitudes que las de zonas pantanosas. También recomienda cuándo y cómo recoger las semillas, época de recolección, modo de cortarlas o de extraer su savia, etc. Asimismo proporciona información sobre su conservación.

Respecto a las ilustraciones habría que revisar los manuscritos medievales y las ediciones renacentistas.   El Códice más antiguo conservado de Dioscórides es el Vindobonensis, antes Constantinopolitanus en el que el texto se presenta por orden alfabético. Parece que las imágenes derivan de originales de una fecha tan temprana como el siglo II d.C. Varían mucho en calidad y claramente no proceden todos de la misma mano. Algunos, incluso, parece que fueron realizados por Cratevas. Las entradas de los capítulos de De Materia Medica se ordenaron alfabéticamente y sus descripciones se aumentaron con observaciones de Galeno y Crateuas (Krateuas). También se adjuntaron cinco textos suplementarios, incluyendo la Theriaca y Alexipharmaca de Nicandro y la Ornithiaca de Dionisio de Filadelfia (siglo I d.C.), que describe más de cuarenta aves mediterráneas. Después, lo que pasó es que los copistas dibujaron las plantas copiándolas y no a partir de la propia naturaleza. El cod Parisinus gr. 2179 es el mejor testimonio de la obra genuina de Dioscórides con el orden sin alterar.  

Con la aparición de la imprenta uno de los primeros libros que se editó fue este. Aparte de volver a traducir los originales, se trató de reconstruir lo original de Dioscórides a lo que se añadieron a veces comentarios, nuevas plantas y corrección de errores como era característico del Renacimiento, pero de forma separada. Se tradujo, además, a las lenguas vulgares como el castellano y el italiano.   Los grabados que acompañan a la edición de Andrés Laguna parece que los encargó él mismo a un taller veneciano para su edición castellana. Se inspiran en los de la versión latina de Mathioli. Luego se trasladaron a Amberes donde se hizo la edición principal y más tarde se trasladaron a España concretamente a Valencia hasta 1695. La edición de Madrid de 1733 ya no los usó.  

Esta edición de Gredos [Se muestra a cámara], en dos volúmenes, es una de las últimas traducciones que sepamos que se ha realizado de la Materia médica de Dioscórides de la mano de Manuela García Valdés.  

Bibliografía

Dioscórides. (2006). Sobre los remedios medicinales. Manuscrito de Salamanca. Estudios y Traducción. Salamanca, Ediciones de la Universidad de Salamanca.

Dioscórides. (1998). Plantas y remedios medicinales (De materia médica). Traducido por Manuela García Valdés. 2 vols. Madrid, Gredos.

Dubler, C.E. (1954). La ‘Materia Médica’ de Dioscórides.  Transmisión medieval y renacentista. 5 vols. Barcelona, CSIC.

Gómez Moreno, A. (2000). La resurrección de Dioscórides y la edición comentada de Laguna. Criticón, nº 79, pp. 107-122.

Paid-Dhungat, J.V.; Parikh, F. (2015). Dioscorides (ca 54-68 aC). J Assoc Physicians India, vol. 63, nº 3, p. 20.

Pedacius Dioscorides. (1965). JAMA, vol. 194, nº 8, pp. 907-908.

Staub, P.O.; Casu, L.; Leonti, M. (2016). Back th the roots: A quantitative survey of herbal drugs in Dioscordies ‘De Materia medica’ (ex Matthioli), 1568). Phytomedicine, vol. 23, nº 10, pp. 1043-52.

Frances Oldham Kelsey (1914-2015)

Imagen publicada en Dr. Frances Kathleen Oldham Kelsey . Colección Historia de la Medicina. Biblioteca Nacional de Medicina.

Para terminar el año, incluimos en la sección de «Epónimos y biografías médicas» de historiadelamedicina.org, la biografía de Frances Oldham Kelsey, una canadiense que vivió y trabajó en los EE.UU. En este caso no se premia el número de publicaciones, ni su importancia, ni ningún gran descubrimiento. Su nombre destaca por haber sido rigurosa y no dejarse convencer en la aprobación de un nuevo medicamento. La FDA le dio este expediente porque era uno de los primeros que tuvo que resolver y no presentaba problemas. Al fin y al cabo el fármaco llevaba varios años vendiéndose en Europa y otros países. Se trataba de la talidomida.

Nació el 24 de julio de 1914 en Cobble Hill, una pequeña comunidad en la isla de Vancouver, Columbia británica, Canadá. Obtuvo el grado de ciencias en la Universidad McGill y la maestría en farmacología en la misma ciudad. Después trabajó en el Departamento de Farmacología de la Universidad de Chicago. Participó en aclarar la muerte de 107 personas por el uso de sulfanilamida con el solvente dietilenglicol, que fue el responsable. En 1938 Kesley completó el doctorado en farmacología, con un trabajo sobre la farmacología de la glándula pituitaria del armadillo

Trabajó después en un gran proyecto para buscar nuevos antimaláricos. Conoció a Fremont Ellis Kelsey con quien contrajo matrimonio en 1943. Como los dos no podían trabajar juntos, ella cursó los estudios de Medicina.

Cuando terminó en 1950 fue editora asociada del Journal of American Medical Association. Después su marido recibió la oferta de dirigir el Departamento de Farmacología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Dakota del Sur en Vermillon. Mientras Kelsey hizo la residencia en el The Sacred Heart Hospital. Después siguió investigando y ejerciendo la profesión.

Finalmente en 1960 Kelsey fue contratada como médico por la FDA en Washington DC. Su marido también obtuvo otro puesto de trabajo en la misma ciudad. Fue una de los siete médicos a tiempo completo y de cuatro jóvenes a tiempo parcial que se dedicaban a revisar nuevos medicamentos. Uno de los primeros fármacos con los que se enfrentó por una solicitud de la Compañía Richardson-Merrell que presentó el 12 de septiembre de 1960, fue la talidomida. El fármaco debía reunir tres informes que estuvieran de acuerdo, uno químico, otro farmacológico y otro de tipo clínico. Kelsey realizó este último y fue la que coordinó el expediente. Fue exigente desde el primer momento y no cedió nunca a las presiones que ejerció la Compañía. Mientras tanto, se conoció el desastre que la talidomida estaba provocando en Europa, Canadá, Australia, etc.

Kelsey evitó que esto se repitiera en los EE.UU. e influyó en el cambio de la normativa para que un laboratorio farmacéutico pusiera a la venta un nuevo medicamento. Tuvo repercusiones internacionales. Kelsey siguió hasta los años noventa en la FDA defendiendo siempre el trabajo bien hecho, es decir, garantizar la seguridad de los nuevos medicamentos. Murió en Canadá a los 101 años.

Dorothy Mary Crowfoot-Hodgkin (1910-1994) 

Hemos incluido en la sección de «Biografías y epónimos médicos» de historiadelamedicina.org, la de la química Dorothy Mary Crowfoot-Hodgkin.

* Imagen: Retrato de Jessica Augarde Photography. Dorothy Hodgkin (1910-1994), CC BY-SA 2.0

Dorothy Crowfoot-Hodgkin fue una mujer que se dedicó toda su vida a la investigación científica con la singularidad de que le gustaban los temas difíciles que sus colegas creían inaccesibles. Combinó la investigación con ser madre, con una enfermedad incapacitante y con una actividad social fuera de lo común. Fue, además, discreta, característica de la que carecen muchos que dedican gran parte del tiempo a autopromocionarse y trepar valiéndose de actuaciones deshonestas. La ciencia no escapa a estas situaciones.

Fue una mujer que creyó en la justicia social. La primera guerra mundial, su visita a Sudán de niña y a Palestina antes de asentarse en Oxford, la guerra civil española y la gravedad de la amenaza fascista de Hitler y Mussolini le llevaron a ser profundamente antimilitarista. Después de la segunda guerra mundial creyó en la necesidad de seguir en contacto con la Unión Soviética y otros países socialistas. Sin embargo, estas posturas no impedían que se relacionara con naturalidad con personas de ideas contrarias a las suyas. Estaba a favor del diálogo entre oriente y occidente y entre norte y sur. Estuvo excluida de visitar los Estados Unidos entre 1953 y 1957. Con su colega y maestro Bernal, en cambio, pudo conocer la Unión Soviética, su sociedad y su ciencia. No obstante, ya tenía noticia de los abusos de Stalin y la desaparición de científicos rusos y visitantes de otros países. Se le dio una larga lista de desaparecidos para ver si podía averiguar algo.

Dorothy nació en El Cairo, cuando era colonia del Imperio británico, el 12 de mayo de 1910. Sin embargo, vivió casi siempre en Londres. Su padre, John Winter Crowfoot, trabajaba en el Servicio de Educación de Egipto. Comenzó los estudios de química en el Somerville College de Oxford en 1828. Dorothy decidió realizar su tesis de doctorado en Cambridge en el laboratorio de Bernal. Consiguió determinar la estructura tridimensional de las siguientes biomoléculas: la penicilina en 1945, la vitamina B12 en 1954, y la insulina en 1969, entre otras.

Recibió el premio Nobel de Química en 1964. Después empezó a organizar un Laboratorio en Oxford parecido al que se acababa de crear en Cambridge bajo la dirección de Bragg. También pensó en David Chilton Phillips (1924-1999) que conoció en Canadá en 1952 y que en 1956 regresó a Gran Bretaña para trabajar con Bragg en la Royal Institution para que llevara la sección de Biofísica molecular.

Preocupada por la paz y la amenaza de una guerra llegó a ser un miembro muy activo de la organización científica por el desarme que surgió del manifiesto de Bertarnd Russell y Albert Einstein, la Conferencia Pugwash; fue su presidenta entre 1976-1988. Recibió numerosas distinciones y premios a los largo de su vida. Trabajó e impartió conferencias hasta el último momento.

Dorothy murió el 29 de julio de 1994 a los 84 años de edad de una hemorragia cerebral.

Historia de la medicina. Noticias en español (diciembre, 2021 #1)

Ruta por las viejas boticas y los medicamentos naturales. Por Iratxe López.
Fuente: El Correo

¿Qué e el cólera? Historia y características
Fuente: Redhistoria

Colegio de Medicina Interna de México, una institución con enfoque integral. Por Bárbara García.
Fuente: Saludario

Un Emy para la historia del Dr. Tapia
Fuente: Religionenlibertad

Exaltan a diez figuras ilustres en el Salón de la Fama de la Medicina Puertorriqueña. Por Yolimarian Torres
Fuente: Medicina y Salud Pública

Un doctor de la USC, finalista del Hernández Morejón
Fuente: El Correo Gallego

Entendamos qué es la medicina legal. Por Ednna Milvia Miranda
Fuente: El Heraldo

La historia del baile de San Vito, la extraña enfermedad que hacía bailar a los enfermos. Por Jorge García.
Fuente: 20 Minutos

Día mundial de la radiología: como el descubrimiento casi accidental de los rayos X cambió la historia de la medicina. Por Paula García.
Fuente: FayerWayer

Archivo histórico: Cayetano Heredia, médico y maestro excepcional. Por Héctor López Martínez.
Fuente: El Comercio (Perú).

El Centro cultural San Agustín acoge este viernes, 12 de noviembre, la actividad ‘Una tarde de Historia en Xerez Equitum’
Fuente: Jerez de los Caballeros

Las I Jornadas del. Museo de Historioa de la Medicina y Salud de Zafra contará con conferencias y teatro.
Fuente: Directo Extremadura

La no tan dulce historia de la diabetes. Por Marcos Durán Flores.
Fuente: La Voz

¿Qué es una pandemia y cuántas ha habido a lo largo de la historia?
Fuente: BBVA

Morfina, la medicina del propio Dios. Dr. Antonio G. García – iSanidad
Fuente: iSanidad

Janet G. Travell (1901-1997)

Hemos añadido una nueva biografía a la sección «Biografías y epónimos médicos» de historiadelamedicina.org. Se trata de Janet G. Travell (1901-1997).

Lo primero que llama la atención de esta biografía es que por recomendación del cirujano ortopédico del senador John F. Kennedy, Janet lo examinó en la primavera de 1955. Sufría fuertes espasmos en la parte inferior izquierda de la espalda que irradiaban a su pierna izquierda impidiéndole caminar. Parecía deberse a varias intervenciones quirúrgicas relacionadas con lesiones que sufrió durante la segunda guerra mundial.

Travell inyectó dosis bajas de procaína en los “puntos gatillo” miofasciales de los músculos lumbares, lo que resultó eficaz. También ordenó que hicieran el talón de su zapato izquierdo más alto ya que sus piernas tenían diferente longitud. Asimismo le diseñó una mecedora que se hizo muy popular. Kennedy mejoró extraordinariamente y cuando fue elegido presidente de los Estados Unidos nombró a Janet su médica personal.

Janet nació en Nueva York el 17 de diciembre de 1901. Su padre, John Willard, era médico. En 1926 obtuvo el título de médico por la Universidad Cornell, Nueva York. En un principio Janet quiso ser cardióloga. En 1929 participó en un proyecto de investigación del que formaban parte grupos de Cornell, Nueva York y Columbia, que pretendía valorar la utilidad de la digital en el tratamiento de la neumonía lobular.

Gracias a una beca Josiah Macy, Jr., estuvo en el Beth Israel Hospital de Nueva York para estudiar las enfermedades arteriales de 1939 a 1941. Después cambiaron sus intereses de la cardiología a la ortopedia. En la consulta de cardiología del Sea View Hospital observó que la mayoría de los pacientes tenían una enfermedad pulmonar potencialmente mortal, pero algunos se quejaban más de un fuerte dolor en los hombros y brazos que de su enfermedad principal (sucedía esto hacia el año 1936). Cuando los examinó mediante la palpación sistemática de la escápula y los músculos del pecho, descubrió la presencia de “áreas desencadenantes”.

En 1942, Janet Travell, en colaboración con Seymour H. Rinzler, y Myron Herman publicaron “Pain and Disability of the Shoulder and Arm: Treatment by Intramuscular Infiltration with Procaine Hydrochloride” (“Dolor y discapacidad del hombro y el brazo: tratamiento por infiltración intramuscular con clorhidrato de procaína”). En el mismo señalaban que cuando un paciente se quejaba de dolor en el hombro y el brazo con o sin limitación de movimiento y sin estar relacionado con un traumatismo severo, los médicos pensaban en las articulaciones, tendones o nervios de la zona en lugar de los músculos de la cintura escapular como la causa principal. Así, se les diagnosticaba de artritis, bursitis subacromial, neuritis braquial o radiculitis. Los tratamientos no eran satisfactorios porque no se buscaba la verdadera causa subyacente.

Diez años más tarde, ella y Rinzler reportaron los patrones de dolor de los puntos gatillo en 32 músculos esqueléticos, en ‘La génesis del dolor miofascial’ (“The myofascial génesis of pain”) que se convirtió en la fuente clásica de esta información. Como hemos dicho, un punto gatillo es una zona hiperirritable del músculo asociada a un nódulo hipersensible localizado dentro de una banda tensa de fibras musculares.

Más tarde conoció a Dave Simons (1922-2010), médico y astronauta, que se interesó en la obra de Travell. Durante veinte años investigó el dolor miofascial. Juntos publicaron el “Manual de puntos gatillo” (Trigger Point Manual) cuyo primer volumen apareció en 1983.

Janet Travell falleció el 1 de agosto de 1997. Prácticamente hasta el último momento estuvo trabajando, dando conferencias y escribiendo.

Janet G. Travell. Fotografía tomada en la Casa Blanca. Dominio público