El año 1910 fue para el Instituto Médico Valenciano un periodo de reflexión y de sobresaltos. Desde la constitución del Colegio de Médicos, el Instituto no acababa de encontrar su razón de ser. Dicho de otra manera, cuáles debían ser sus fines. Sin embargo, con mayor o menor fortuna siguió su marcha habitual como hemos tenido ocasión de ver. En 1910 una serie de socios pretendieron dar nueva vida a la Corporación. Los repetidos intentos de que los socios prepararan comunicaciones de valor científico para su discusión, no acababa de cuajar. Se envió una circular a los médicos, farmacéuticos y veterinarios explicándoles la nueva orientación que se trataba de dar al Instituto y en la que se solicitaba su adhesión. Una de las propuestas era el relanzamiento del Boletín (con este u otro nombre). La respuesta fue desigual.
Ese mismo año se celebró en Valencia la Exposición Nacional, prolongación de la Regional. Con tal motivo se convocaron diferentes congresos. Entre ellos uno de la Sociedad para el Progreso de las Ciencias. Como el Instituto estaba implicado, parece que algunos médicos se adhirieron sólo por participar en este Congreso. Al final de año estalló la situación y se produjeron varias dimisiones. Había un grupo que sostenía que la Junta directiva había hecho poco para poner en marcha la nueva orientación del Instituto. Otros defendían que no se había producido la respuesta esperada entre los médicos. Las Juntas extraordinarias se sucedieron. Cada tema que se discutía afloraban los conflictos y las diferentes posturas. Para agravar la situación, la Comisión que debía juzgar las memorias presentadas a los Premios sobre uno de los temas, presidida por el Dr. Gómez Ferrer, no había emitido dictamen a finales de año. Esto retrasó el segundo de los actos solemnes que celebraba anualmente el Instituto. Sin embargo, fue el año que más trabajos o memorias se presentaron a la convocatoria.
Todo quedó dispuesto para que el año 1911 fuera distinto. El nuevo presidente, que se eligió dos veces por la dimisión del Dr. Mollá, sería el Prof. Manuel Candela Plá.
En otros posts nos ocuparemos del contenido de la circular difundida para cambiar la orientación del Instituto y del Congreso para el Progreso de las Ciencias.
4 de enero de 1910, Junta directiva
Se acordó imprimir la memoria premiada del Dr. Slocker. Si el precio no excedía de 25 pts se podían imprimir quinientos ejemplares. También se tomó la decisión de remitir la otra memoria ganadora a su autor D. Alonso Marcos de Val (San Lorenzo, León) con el fin de que la revisara para su impresión.
Se acordó que el cobrador del Instituto se encargara de cobrar los recibos de los socios de la Academia Médico-Escolar, quedándose el Instituto el 5 por cien.
Se dio noticia de la recepción de un oficio del Círculo de Bellas Artes, en el que se ofrecía al Instituto para todo lo que fuera útil.
4 de enero de 1910, Junta general ordinaria
La Presidencia pidió informe de cómo estaba el asunto de la circular que se remitió a médicos, farmacéuticos y veterinarios, iniciativa del Dr. Chabás. Se le contestó que se habían repartido todas a excepción de las dirigidas a farmacéuticos y veterinarios. Se había recibido contestación y adhesión de Manuel Montesinos, Vicente Arau, Celedonio Calatayud, Vicente Candela Gil, Juan Bartual, R. Canchoud (?), Mariano Pérez Feliu, R. Zarzoso, Roberto Marco, Pablo Colvée, Vicente Barberá Ferrer, Ricardo Franch Mira, Claudio Martí, Ramón Vila, Diego Sarrió, Lorenzo Arroyo, Salvador Campos y Rafael Martínez Seguí.
A propuesta del Dr. Carsí se autorizó a la presidencia a convocar junta general para estudiar la manera de confederarse con otras corporaciones.
A propuesta del Dr. Chabás se constituyeron las comisiones para visitar a los compañeros:
1. Antonio Casanova, Vicente Arau y Enrique Gay
2. Eduardo Pérez López, Mariano Pérez Feliu y Joaquín Aguilar Jordán
3. Vicente Carsí, Francisco Torrens y Enrique López Sancho
4. José Chabás, Alfredo Moscardó y Manuel Portaceli
5. Manuel Desfilis Pascual, Agustín Trigo y Rafael Martínez Seguí
6. Francisco López Vicent, Miguel Martí Pastor y Rafael Morant
7. Tomás Blanco, Manuel Montesinos y R. Canchoud
8. Joaquín Vila, Ramón Morant y Francisco Antolí Candela
El Dr. Torrens presentó el estado de caja: Instituto (917,68 pesetas); Fundación Röel (4.090,47 pesetas); Caja de Ahorros (974,60 pesetas); en efectivo (417,68).
Finalmente se aprobó el presupuesto para 1910.
3 de marzo de 1910, Junta directiva
Se aprobó el pago de diferentes gastos.
3 de marzo de 1910, Junta general ordinaria
Fue admitido como socio residente D. Francisco Guerrero Bolinches y como socio correspondiente, D. Jorge Person.
Se leyó una carta del Dr. Trigo que incluía las siguientes adhesiones: Rafael Martínez, José M. Marzal, Matías Ferrer, Vicente Roig Mir, Rafael Cervera Barat, R. Corell, R. (?), R. Bellver y Jaime García Español.
Se acordó solicitar al Dr. Slocker la cantidad de cien pesetas para contribuir a la impresión de su memoria.
Se acordó celebrar la sesión apologética el día 31 de marzo.
31 de marzo de 1910, Sesión apologética
Tras la lectura de los artículos del Reglamento relativas al acto, ocupó la tribuna el Dr. Peset Aleixandre, quien leyó un discurso sobre la figura de D. Luis Bertrán, fundador del Instituto. Hizo un recorrido por su época de estudiante, de médico y de escritor, centrándose después en la fundación del Instituto. Recordó sus objetivos: adelanto de la ciencia, provecho para la ciudad y mejora de las clases. Terminó refiriéndose a la última circular enviada a los profesionales, “¡Ójala dé frutos la última circular en demanda de socorro! ¡Todo menos destruir una obra tan portentosa!”. Fue muy aplaudido.
Terminó el acto el Presidente con unas palabras.
15 de abril de 1910, Junta directiva
Se aprobó el pago de diferentes gastos.
Se aprobó el ingreso de Francisco Ferrero Bolinches como socio residente y de Jorge Perron Zurlinder, como socio correspondiente.
Se informó de nuevas adhesiones a la circular: Juan Nájera, Salvador Valero Estopiñá, Ramón Gómez Pérez, Francisco López, León Solis Clarás, Manuel Lleó Silvestre, Rafael Campos Fillol y José Grifol Aliaga.
El Dr. Chabás leyó el trabajo hecho por la comisión nombrada para redactar las bases de reformas del Instituto. Tras discusión, se propuso que la comisión redactara un plan más práctico en el estado en el que se encontraba la Corporación. Una vez discutido, debía presentarse a la Junta general.
13 de junio de 1910, Junta directiva
El Secretario leyó una carta del Dr. Vila Barberá dirigida a la Presidencia en la que suplicaba una reunión para tratar la forma que habría que seguir para llevar a la práctica el pensamiento que tenían algunos socios de la Corporación sobre una serie de trabajos y conferencias.
Se apoyó la propuesta.
13 de junio de 1910, Junta general
El Sr. Carsí se lamentó de que había convocado dos veces a la comisión encargada de la reforma del Reglamento y sólo había acudido el Dr. Aguilar Jordán. Preguntó qué debía hacer.
El Dr. Guillén le contestó que insistiera y que constituyera la comisión para comenzar a discutir los temas pendientes. Siguió diciendo que sería lamentable que después de prometer reformas mediante circulares y de haberse inscrito nuevos socios, las cosas quedaran como estaban antes.
Se dio cuenta de haber recibido las siguientes memorias para acceder a los premios:
1. -Contribución al estudio clínico de la tuberculosis. Sin lema.
2. -Estudio crítico de los medios propuestos para la investigación urológica de la glucosa. Lema: Van der Vyvere’
3. -Indicaciones de la intervención quirúrgica en la litiasis biliar. Lema: ‘Gloriosos los pueblos que consagran su vida a la Ciencia Médica’
4. -Indicaciones de la intervención quirúrgica en la litiasis biliar. Lema: ‘El bello ideal de la terapéutica quirúrgica es precisar su indicación’
5. -Indicaciones de la intervención quirúrgica en la litiasis biliar. Lema: ‘Ateroduajela’
6. -Trabajo de investigación personal sobre tuberculinización y tuberculinoterapia. Lema: ‘Si la tuberculinoterapia es tanto más eficaz cuanto más se aproxima su empleo al principio de la enfermedad…’
7. -Determinación cuantitativa de la glucosa: crítica de los procedimientos que puedan emplearse (Asunto libre). Sin lema.
8. -La vacuna y el tratamiento del coqueluche. Lema: ‘Vaccine’
9. -Nociones generales sobre la oftalmia purulenta del recién nacido, necesarias al practicante su conocimiento, deducidas de mi práctica como médico especialista en Oftalmología. Lema: ‘A los queridos auxiliares del médico’
10.-Microbiología de los protozoarios patógenos’. Lema: Pasteur’
11. -Estudio crítico de los medios propuestos para la investigación urológica de la glucosa. Lema: ‘Sabor’
12. -Indicaciones de la intervención quirúrgica en la litiasis biliar. Lema: ‘Hipócrates, Galeno, Pastur’.
13. -Nuevo concepto etiológico, patológico y terapéutico del tifus en sus diversas formas. Sin lema.
14. -Balances nutritivos del fósforo en el organismo normal y patológico. Lema: ‘Trabajo para el concurso de 1910’
15. -Trabajo personal sobre sobre un asunto de medicina. Lema: ‘Pasteur, Koch, von Behring’
16.-Topografía médica de Rótiva y pueblos anexos a su distrito’. Lema: ‘Los elementos de que el hombre de ciencias puede valerse en favor de sus semjantes…’
17. -Estudio biológico sobre la herencia de caracteres. Lema. ‘Fénix’
18. -Tres fármacos más. Lema: ‘?’
19. -Localizaciones cerebrales. Lema ‘Inteligentia est …’
20. -Investigaciones fisico-fisiológicas. Lema: ‘Le phenomene biologique est…’
21. -Estudio crítico de los medios propuestos para la investigación urológica de la glucosa. Lema ‘Z.W.E.1’
22. -Estudio de las indicaciones terapéuticas. Lema: ‘Respetar es curar’
A propuesta de la presidencia fueron aprobados las siguientes comisiones para juzgar los trabajos:
-Vicente Carsí, Francisco López Vicent y Luis Estopiñá. Trabajos números 3, 4, 12
-Vicente Peset Cervera, Francisco Torrens y Alfredo Moscardó. Trabajos números 2, 7, 11 y 21
-Fracisco Villanueva, Antonio Oliete y Enrique Olaso. Trabajos números 9, 13, 14, 19 y 22 (Asunto libre)
-Constantino Gómez Reig, Vicente Guillén Marco y Francisco de B. Aguilar Martínez. Trabajo número 16
-Ramón Gómez Ferrer, Tomás Blanco y Adolfo Batllés. Trabajos números, 1, 6, 8, 9, 10, 19, 17, 18 y 20.
Fueron designados para redactar el programa de premios del siguiente año Enrique López Sancho, Vicente Carsí, Manuel Olmos y Alfredo Moscardó.
La Presidencia informó de la dimisión irrevocable del Dr. Iborra del cargo de contador. Se acordó a propuesta del Dr. Guillén y de otros, no aceptarla.
30 de junio de 1910, Junta general
Se leyeron las invitaciones del Ateneo mercantil y Lo Rat Penat a los festejos de Julio.
Al insistir el Sr. Iborra en su dimisión, se eligió como nuevo contador a Vicente Dominguez Roca hasta 1911.
Al no aceptar el Dr. Olaso formar parte de una comisión para juzgar los premios, se eligió a Germán Boned.
Se eligió también a Joaquín Vila Belda para redactar el discurso apologético del siguiente año.
El Sr. Pérez Feliu propuso el nombramiento de una comisión para que se encargara de gestionar cerca de los médicos y farmacéuticos, alguna rebaja para la clase escolar médica. Aceptada la proposición fueron designados los Sres. Pérez Feliu y Moscardó para que estudiara dicho asunto.
26 de noviembre de 1910, Junta directiva
No hubo asuntos que tratar
26 de noviembre de 1910, Junta general ordinaria
Se acordó aceptar como socios residentes a Ramón Vila Barberá, Juan Bartual Moret, Manuel Lleó Silvestre, José Grifol Aliaga, Enrique Alós, Francisco Vilata Ferrer, Federico Julián Mira, Luis Lafora Almudéver, y José Casanova Dalfó.
Se aprobó también el dictamen de la comisión del programa de premios para el año siguiente:
-Tema 1: Formas anómalas de paludismo
-Tema 2: Juicio clínico que merece la aplicación del 606 en la sífilis
-Tema 3: Determinación de las materias colorantes y cromógenas de la orina
-Asunto libre: Resolución de un punto importante de las ciencias médicas o sus auxiliares, a juicio del autor
Premios de la Fundación Röel
-Tema 1: Topografía médica de uno de los municipios de la provincia de Valencia
-Tema 2: Trabajo de investigación científica personal sobre un asunto libre de medicina o cirugía.
Se informó de haber recibido una carta de un concursante que rogaba se incluyera su trabajo en los premios Röel al habérsele olvidado consignarlo. Se opusieron Carsí, Pastor Reig y Oliete; a favor, el Dr. Blanco. Se acordó finalmente por unanimidad denegar la petición por ser antirreglamentario y porque el trabajo estaba siendo juzgado por otra comisión.
Posteriormente se dio lectura a los informes de las comisiones que habían estudiado los trabajos presentados a los premios.
-Comisión que debía juzgar los trabajos sobre ‘Indicación de la intervención quirúrgica en la litiasis’. Sin discusión se acordó premiar el trabajo cuyo lema era ‘El bello ideal de la terapéutica…’. Abierta la plica, el autor era D. Emilio Casas Ariola, doctor en Medicina, residente en Logroño. Segundo premio para el trabajo de Francisco Reig Pastor, cuyo lema era ‘Hipócrates, Galeno, Pasteur’. El tercer premio para Mariano Fernández Corredor y Chicote, especialista en otorrinolaringología, oftalmología, y dermatosifilografía, de Valladolid, cuyo lema era ‘Gloriosos los pueblos…’.
-Comisión que debía juzgar los premios sobre ‘Juicio crítico de los medios propuestos para la investigación urológica de la glucosa’. Se acordó el primer premio para el trabajo cuyo lema era ‘Z.W.E.J’, de los autores Juan Bautista y Tomás Peset Aleixandre, socio del instituto, catedrático de Medicina legal de Sevilla, y veterinario de 1ª clase y alumno de 6º de Medicina de la Facultad de Valencia, respectivamente. Tercer premio para D. Francisco Más Magro (lema, ‘Labor’), médico de Crevillente, provincia de Alicante.
-Comisión que debía juzgar los premios sobre el tema libre. Se aprobaron sin discusión. Primer premio para D. Jesús Marín (lema. ‘Inteligentia…’), subdirector del Manicomio provincial y socio residente del Instituto, autor del trabajo ‘Localizaciones cerebrales’. Segundo premio para José Mendey, de Zamora (lema, ‘Gutta cavat lapidem…’), por su trabajo ‘Balances nutritivos del fósforo en el organismo normal y patológico’.
-Comisión que debía juzgar los premios Röel. Premio para ‘Topografía médica de Rótova y pueblos anexos a su distrito’, de Ignacio Sánchez, médico titular de Rótova (lema, ‘Los elementos de que el hombre de ciencia…’).
Se propusieron como socios residentes a los Sres. Abel Bueso, Manuel Jordán, Vicente García Ibañez, Vicente Oliete Balader, Américo Montoro, Manuel Peris Forés, José Fernández Martí, Luis Aldás Torres, Ramón Morell, José María Claver, y José Climent Vilá.
7 de diciembre de 1910, Junta general ordinaria
Fueron admitidos como socios los Sres. Abel Bueso, Manuel Jordán, Vicente García Ibañez, Vicente Oliete Balader, Américo Montoro, Manuel Peris Forés, José Fernández Martí, Luis Aldás Torres, Ramón Morell, José María Claver, y José Climent Vilá.
Reingresaron como socios José LListerri Ferrer, Faustino de (?) Sánchez, Ramón Alapont Ibañez y Ramón Villafañe Sánchez de Soto.
No hubo más asuntos que tratar
7 de diciembre de 1910, Junta general extraordinaria
Se realizaron las elecciones para cubrir los cargos que quedaban vacantes de la Junta. Estos fueron los resultados:
-Presidente: Rafel Mollá
-Secretario de actas: Ramón Vila Barberá
-Tesorero: Francisco Torrens
-Presidente Comisión de Medicina: Adolfo Batllés
-Presidente Comisión de Farmacia: Agustín Trigo
-Vicesecretario general: Ramiro Ruíz
-Vicecontador: Manuel Portaceli
-Vicebibliotecario: Mariano Pérez Feliu
El Sr. Aguilar Jordán preguntó si la otra media Junta estaba con carácter interino y si debían elegirse dichos cargos. El Presidente le contestó recordando el Reglamento.
16 de diciembre de 1910, Junta general extraordinaria
Presidencia del Dr. Carsí
Se dio lectura a una comunicación suscrita por diez socios solicitando Junta extraordinaria para tratar asuntos de régimen interior. El Presidente señaló que había accedido por deferencia ya que por Reglamento no era lo adecuado al no figurar explícitamente el tema de la petición.
El Sr. Oliete expuso que, después de repartida la circular solicitando colaboración a la clase farmacéutica a cambio de imprimir una nueva orientación al Instituto, se produjo una respuesta positiva. De 114 socios que había en enero de 1910, subió a 159, pero en vista de que las reformas no prosperaron por la inactividad de la Directiva, se dieron de baja unos cuantos. Por ese motivo preguntó el Dr. Carsí si había llegado el momento de emprender las reformas prometidas en la circular. Asimismo, si la Junta estaba en ‘prórroga de poderes’ hasta que se pusiera en vigor la reforma anunciada.
Los Sres. Chabás, Aguilar Jordán y Domínguez Roca manifestaron que ellos habían aceptado los cargos respectivos como prórroga y, por tanto, presentaban la dimisión de los mismos de forma irrevocable, por considerarse fracasados en las gestiones que les encomendó la Junta.
Manifestaron su conformidad con la actitud de los dimisionarios los Sres. Campos Igual, Vila Barberá, Llisterri, Berdún, Pérez Feliu, Montoro y Vila Belda.
Los Sres. Llisterri, Montoro y Berdun presenaron un voto de censura para la Junta directiva, por la poca actividad desplegada y por creer que los señores que no han presentado la dimisión, deberían presentarla. Fue retirada a petición de los señores Peset y Campos Igual.
La Presidencia “se condolió mucho de la actitud poco armónica de algunos señores, e hizo historia de los trabajos verificados por la Directiva nombrando comisiones especiales, en una de las cuales formaban parte los señores Chabás y Aguilar Jordán, a quiénes convocó repetidas veces para el estudio de la reforma del Reglamento, no pudiéndose reunir a pesar de sus esfuerzos”.
También señaló que la media Junta se eligió con carácter de interinidad -antirreglamentariamente- hasta que se reformasen los Estatutos, pero como dicha reforma no se había llevado a cabo, por eso continuaban formando parte de la misma.
Contestando al Dr. Oliete, señaló que creía que era momento de iniciar las reformas. Respecto a su segunda cuestión, le pidió que la retirara para ser abordada en otra sesión.
El Dr. Torrens manifestó que los datos aportados por el Dr. Oliete no eran del todo exactos. Se habían apuntado muchos socios, pero no pagaban; incluso algunos, cuando se les fue a cobrar contestaron que se dirigieran a sus proponentes. Asimismo, la clase médica no había respondido como se esperaba, siendo escasas las adhesiones y debidas la mayor parte a trabajos particulares y al Congreso de la Asociación española para el Progreso de las Ciencias.
Oliete y Domínguez Roca, dijeron que los datos que habían dado los habían tomado del Libro de Contaduría.
Se acordó mayoritariamente respaldar las propuestas del Dr. Oliete. Cesó así la mitad de la Junta del año pasado.
Domínguez Roca solicitó a la Presidencia que convocara a Junta general extraordinaria para tratar del Boletín y de los medios que se se pudieran poner en práctica para dicha publicación.
19 de diciembre de 1910, Junta directiva
Presidió el Dr. López Sancho
El Dr. Carsí informó de lo sucedido en la Junta extraordinaria. La Presidencia, de acuerdo con los presentes, acordó redactar el escrito de dimisión en los siguientes términos:
“Los abajo firmantes, individuos de la Junta directiva del Instituto Médico Valenciano a Vd. con el mayor respeto exponen: Que considerando caducado el tiempo empleado en los trabajos de reforma de esta Corporación y no satisfaciendo la labor empleada a algunos señores socios como públicamente se ha manifestado, deciden, de una manera irrevocable, presentar la dimisión de sus cargos, haciendo constar que todos colectivamente y cada uno en la medida de sus fuerzas han de prestar su modesto concurso a la serie de reformas que se inicien en esta ilustre Corporación. Dios guarde a Vd… Valencia, 19 de diciembre de 1910”. Siguen las firmas.
19 de diciembre de 1910, Junta general extraordinaria
Se leyó la comunicación de que la Junta directiva había dimitido en pleno.
Se eligió a la mesa interina que quedó constituida por Presidente, Secretario general y Secretario de actas: Cándido Antolín, Francisco Reig Pastor y Tomás Peset, siendo el primero el más antiguo y el último el más joven de la Corporación.
El Sr. Reig Pastor solicitó y se le concedió permiso para imprimir por su cuenta la memoria presentada al Concurso de premios del Instituto.
El Sr. Carsí propuso que se verificaran las elecciones correspondientes al turno de vicepresidencia. Vilanova opinó que debían elegirse los cargos que quedaron vacantes en la sesión anterior. El Sr. Julián propuso que se llevara todo a cabo de acuerdo a la convocatoria que decía: “Provisión de las vacantes de la Directiva”. El Sr. Peset (D. Juan) abogó por este criterio fundándose en la conveniencia de evitar que se multiplicaran las sesiones no científicas -como la actual- y evitar que el Instituto permaneciera en la situación de inestabilidad. Opinó que debían elegirse todos los cargos y no sólo los vacantes.
El Sr. Carsí dijo que se admitieron de palabra las dimisiones de los Sres. Chabás y Aguilar.
El Sr. Peset señaló que convenía abreviar en lo posible la provisión de cargos. El Sr. Pallarés propuso que continuara la Junta provisional hasta la sesión posterior. Portaceli se adhirió a la proposición de Peset e indicó la conveniencia de fijar con claridad el tiempo que duraría la nueva Junta. El Sr. Carsí le contestó con arreglo al Reglamento, según el cual, el turno de Presidente terminaría a fin del actual mes, y el de vicepresidente, a fines del próximo año 1911.
Se procedió a la elección de la Junta completa.
El Sr. Campos Igual propuso la siguiente candidatura:
-Presidente: Sr. Mollá
-Secretario de Actas: Vila Barberá
-Tesorero: Torrens
-Vicesecretario general: Ruíz
-Presidente C. de Medicina: Batllés
-Presidente C. de Farmacia: Guillén
-Vicecontador: Portaceli
-Vicebibliotecario: Pérez Feliu
-Vicepresidente: Oliete
-Secretario: Olmos
-Contador: Domínguez
-Presidente C. de Cirugía: Lloret
-Presidente C. de Epidemiología: Chabás
-Vicetesorero: Vila Belda
-Vicesecretario de actas: Fernández Martí
El Sr. Pérez López pidió que la presidencia de la Comisión de Farmacia no recayera en un farmacéutico, aunque respetaba el nombre propuesto. Aguilar y Peset recordaron los méritos del Dr. Guillén, su historia brillante dentro del Instituto y su cargo de Jardinero Mayor del Jardín Botánico. El Sr. Pérez López se adhirió a estas palabras.
El Sr. Carsí propuso que se nombraran comisiones para informar sobre el proyecto de presupuestos y para estudiar la reaparición del Boletín.
El Sr. Domínguez presento el proyecto de presupuesto para 1911.
El Sr. Oliete preguntó se se deseaba que el Boletín reapareciera o no.
El Sr. Chabás recordó que en 1908 se expresó el deseo de que volviera a publicarse.
El Sr. Torrens señaló que no debía convocarse la reunión sobre el Boletín hasta que se analizara el presupuesto y se viera si era posible o no que volviese a aparecer el Boletín.
El Sr. Peset dijo que, aunque no apareciese, podría reunirse la comisión para prepararlo por si acaso fuera viable, ya que llevaba mucho trabajo.
El Sr. Oliete insistió en la necesidad de saber si había dinero para el Boletín y que hacían falta muchos trabajos preliminares para relanzarlo.
El Sr. Olmos propuso cerrar la sesión y abrir otra nueva para ajustarse al Reglamento del Instituto. Así se acordó para poder discutir el presupuesto.
A continuación se acordó nombrar comisiones para estudiar el presupuesto, por un lado, y para el Boletín, por el otro. Respectivamente: Bueso, Lafora y Campos Igual; Aguilar Jordán, Peset, Oliete, Domínguez y Guillén.
20 de diciembre de 1910, Junta directiva
Presidió el Dr. Oliete
Tomó posesión la Junta elegida que sustituyó a la accidental, compuesta por Cándido Antolín, Francisco Reig y Tomás Peset.
Se agradeció a las Juntas directivas salientes su labor.
A continuación el Sr. Olmos, Secretario, leyó una carta del presidente electo Dr. Mollá, en la que renunciaba a su cargo de forma irrevocable. Los miembros de la Junta expresaron su sentimiento por la determinación del Dr. Mollá y aceptó la dimisión.
A continuación se leyó también una carta del Sr. Vicente Guillén Marco en la que anunciaba que dimitía de su cargo. Los asistentes no la aceptaron y rogaron al Sr. Oliete que fuera a su casa para explicarle cómo había sido defendido en la Junta extraordinaria y cómo se habló de sus méritos con el fin de que reconsiderara su postura.
Se fijó una sesión de la Junta directiva para el día siguiente para discutir los presupuestos, como era preceptivo.
El Sr. Domínguez señaló que se estudiara también en la Sesión el tema del Boletín. Confiaba en que la comisión nombrada al efecto hubiera cumplido su cometido.
Se recordó que no se había celebrado el acto inaugural y que la comisión compuesta por Gómez Ferrer, Pallarés, Trigo y Tomás Blanco, no se había pronunciado en lo relativo a los trabajos presentados para uno de los temas del concurso. Se encargo al Presidente que se entrevistara con el Sr. Gómez Ferrer.
El Sr. Torrens expuso la marcha administrativa del Instituto desde 1905 y el estado de Caja. Mostró una serie de recibos atrasados que consideraba habían sido rechazados por los interesados. Entre ello se mostró los del Dr. Vila Barberá. Éste dijo que en algún recibo figuraba una fecha en la que él aún no era socio y que no tenía ni siquiera noticia de que se le hubiesen presentado. El Sr. Olmos corroboró la primera de las afirmaciones del Dr. Vila. El Sr. Llisterri dijo que su recibo no había sido pagado porque con anterioridad había solicitado la baja del Instituto en aquella época. No obstante, los dos dijeron que se les volvieran a pasar y los pagarían para dar muestras de buena voluntad.
Se informó de que el Sr. Jorge Perrón, residente en Masanasa, pidió el ingreso en la Corporación a principio de año y todavía no se le había contestado.
Después de estos pequeños incidentes, la Junta hizo constar la confianza en el Sr. Torrens por su labor, que hizo extensiva a los miembros de la Junta anterior.
Se aprobó a propuesta del Sr. Llisterri que se invitara a los que debían recibos a que los pagaran.
A continuación se aprobó pagar diversos gastos.
Se aclararon algunos aspectos de la Fundación Röel y se aprobó publicar el programa de premios para el año siguiente. A propósito de este asunto hubo quejas de los asistentes porque algunos no recibieron copias de las memorias impresas premiadas, entre ellos los Dres. Chabás y Antolín.
21 de diciembre de 1910, Junta directiva
Comenzó la sesión el Presidente dando información sobre las gestiones que se le encomendaron. El Sr. Guillén no podía presidir la Comisión de Farmacia y Ciencias auxiliares por no permitírselo su salud. El Sr. Gómez Ferrer dijo que necesitaba más tiempo para emitir dictamen sobre las memorias presentadas.
El Sr. Batllés, presente en la sesión y miembro de la comisión presidida por Gómez Ferrer, corroboró lo dicho por éste. Esto obligaba a escribir a los premiados anunciándoles que se demoraba la entrega de premios.
El Sr. Olmos dio cuenta de haber delegado la representación de un premiado residente en Logroño a un socio para que recogiera su premio.
Comenzaron a estudiarse los presupuestos, pero como figuraba una partida destinada al Boletín en base a unos ingresos ‘eventuales poco realistas’ se acordó dividirlo en dos partes: una ordinaria en la que constaban los gastos corrientes y que se aprobó, y otra extraordinaria en la que figuraba lo relativo al Boletín.
Se acordó convocar para el día siguiente a las comisiones de presupuestos y del Boletín. Conocidos sus informes, se convocaría Junta general.
24 de diciembre de 1910, Junta directiva
Los Sres. Domínguez y Llisterri notificaron el ingreso en concepto de socios residentes a los siguientes Sres: Juan García Almeida, Vicente Chiner y José Ribes Marco y Manuel Bort Olmos
24 de diciembre de 1910, Junta general extraordinaria
Se presentó la nueva Junta.
Se trataron algunos asuntos de trámite.
Se procedió después a la elección de cargos vacantes: Presidente de la sección de Farmacia y ciencias auxiliares y Presidente de la Corporación por dimisión de quienes habían sido elegidos.
Se interrumpió la sesión.
Se volvió a continuar y se propuso el procedimiento de aclamación. El Sr. Llisterri propuso de presidente al Sr. Manuel Candela Plá. Fue elegido por unamimidad. El Sr. Pérez López propuso al Sr. Agustín Trigo para presidir la Comisión de Farmacia. También fue elegido por unanimidad.
Se pasó al siguiente punto del orden del día. Se trataba de aclarar los motivos por los que se había demorado la sesión inaugural. El Presidente explicó que se debía a que una de las comisiones todavía no había deliberado. Para informar a los ya premiados, se propuso poner una nota en el tablón de anuncios de la Corporación explicando los motivos reales del retraso en la celebración de la sesión inaugural, en la que debían entregarse los premios.
El siguiente punto del orden del día era el de los presupuestos. El Presidente explicó lo sucedido en las sesiones de la Junta y en la división del Presupuesto en ordinario y extraordinario.
Se produjo una larga discusión sobre si debían votarse los dos presupuestos u optar por uno solo tal como se hacía cuando se publicaba el Boletín. Al final por 17 votos a favor y 15 en contra se decidió que se admitiera el presupuesto global y no por separado.
Esto provocó una nueva discusión, sobre todo en lo que se refería a ingresos ‘irreales’ que tenían en cuenta las cuotas de los socios correspondientes y los posibles anunciantes en el Boletín. Se señaló que precisamente el Boletín dejó de publicarse porque no pagaban los socios correspondientes y porque no había anunciantes.
Se sometió a votación partida por partida. Se elaboró una lista de socios fiadores por el posible déficit que pudiera producirse.
Se abordó finalmente el último punto del orden del día: Informe de la comisión para la publicación del Boletín. Se aprobó el proyecto a excepción de las tarifas de los anunciantes, que algunos consideraban que eran bajas.
29 de diciembre de 1910, Junta directiva
Presidió el Dr. Oliete.
Tomó posesión de presidente de la Comisión de Farmacia el Sr. Agustín Trigo.
Se acordó dar posesión a los miembros de la Junta que debía dirigir el Instituto a partir del día 2 de enero y que se presentara a Junta general el mismo día.
Se acordó dirigirse al Dr. Gómez Ferrer para que fijase un plazo para emitir el dictamen de los premios pendientes. También oficiar a D. Alfredo Moscardó, secretario de actas, para que en el plazo de un mes consignara en el libro de Actas las que faltaran.
El Bibliotecario informó de la inspección que estaba realizando a la Biblioteca. Dijo que faltaban libros y solicitó que se elaboraran resguardos o recibos para los préstamos. Se acordó pasar el tema a la Junta entrante.
Se acordó imprimir unas hojas para dar de alta y baja a los socios.
Se fijo el horario de la Biblioteca de 8 de la mañana a 8 de la noche, los días laborables. Asimismo, se recordó que nadie podía llevarse ningún libro o revista sin ponerlo en conocimiento del Bibliotecario y sin firmar el correspondientes recibo.
El Bibliotecario debía fijar en el tablón de anuncios de la Corporación las horas diarias de su permanencia en la Biblioteca.
Se discutió después sobre la organización de los libros de actas, de tesorería, de cuentas, etc. y de la mejor forma de archivarlos en la Corporación.
[Estas anotaciones se han podido realizar gracias al Proyecto de Investigación del Ministerio de Educación, HAR2008-04023].
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